Principios Institucionales

 Dentro de la filosofía de la institución se enmarca la axiología como el conjunto de Principios, criterios y valores que guían la institución.

Principios:

Primer principio: EL SER HUMANO ES “PERSONA”

 No se nace siendo persona sino que se llega a ser “persona”, afirma el educador Francés Pierre Faune. Esto significa que el hombre vive en un proceso permanente de autoconstrucción. Nace inacabado y su existencia es un esfuerzo constante para llegar a la realización de sí mismo. Por lo tanto, ser persona es buscar permanentemente la realización, mañana podremos aprender algo nuevo, dentro de veinte años también habrá que aprender y nunca se acabará de aprender. Esta condición del ser humano como persona constituye el campo abierto para que cada estudiante diseñe su proyecto de vida superando las condiciones que se oponen al proceso de autoconstrucción.

 

Segundo principio: EL HOMBRE ES UN SER SOCIAL

 El ser humano inacabado, en proceso continuo de construirse como persona, no puede ser cerrado en sí mismo, necesita de otro para poder realizarse. Sólo en la medida que damos a los demás lo que somos, aprendemos a comunicarnos y a participar, es decir a formar parte del mundo. Gracias a esta dimensión social nos relacionamos con los demás, compartimos proyectos sociales y participamos en la búsqueda del bien común.

 

Tercer principio: LA PERSONA ES LLAMADA A LA LIBERTAD Y A LA

AUTONOMÍA

 La auténtica libertad es un compromiso consciente que el hombre adquiere por si mismo y por los demás. La libertad es una consecuencia de la autonomía puesto que ser autónomo significa “ser ley de uno mismo».

El pleno ejercicio de la libertad de expresión es la capacidad de formular nuestros propios fines y poder elegir los mejores medios para alcanzarlos, Libertad y autonomía hacen al hombre dueño de sí mismo, de su propio destino, de su institución y de la comunidad a la cual pertenece.

 

Cuarto principio: EL HOMBRE ES RESPONSABLE Y CRITICO

 A partir de la naturaleza de ser libre, el hombre es capaz de dar respuesta a las exigencias que sus metas personales le imponen y a los compromisos inherentes a su condición de ser colectivo.

La responsabilidad de la persona es una constante llamada al desarrollo de la personalidad, podemos concluir que ser responsable es llegar a comprometerse y a cumplir con el compromiso que se contrae.

 

Quinto principio: EL HOMBRE ES ACTIVO Y CREATIVO

 El hombre, como hemos visto hasta ahora está hecho para superarse. De esta fuerza constante que lo impulsa a la construcción, superación, su vitalidad, su capacidad de producción y de progreso.

El hombre no realiza una obra cualquiera, sino la de hacerse a sí mismo, su manera de ser y de vivir, de pasar por el mundo y por la historia, comunicando sus pensamientos y sus acciones.

Vista de esta forma, la vida es una tarea propia, un proyecto original y creativo. Ser creativo no quiere decir provocar, necesariamente una obra original basta con ser capaces de tener pensamientos propios, producto de nuestro crecimiento personal, de nuestra actividad creadora